Bipolar sin medicación: Inside Out al Extremo, Intensamente y del Revés

Featured imageA veces pienso que tomar Zyprexa de forma regular y continua (cuando no estoy embarazada) me da ciertas ventajas sobre los simples mortales que no toman antipsicóticos. No sé si le pasa a alguien más, pero siento que mi vida es más fácil que la de los no-medicados, que soy capaz de más inteligencia emocional, de ser más ecuánime y sensata que cualquier mujer común y corriente pasando por un síndrome premenstrual.

Quiero aprovechar que estoy ahora sin medicación por mi segundo embarazo y que estoy bastante sensible para escribir sobre mis emociones y describir cómo se siente cuando llegan a grados extremos

Hay una película que se me viene a la cabeza: Inside Out (en español «Del Revés«, «IntensaMente»). Esta película me encantó, el mundo interno de las personas es fascinante y la peli busca describirlo de una manera sencilla de entender y amena.

Voy a basarme en las emociones que aparecen en la película Inside Out para describirlas cuando se vuelven intensas en mí, y cuando tal vez indican que debo estar alerta y ajustar la medicación:

Alegria del Reves Joy Inside Out

Alegría

La euforia total. En estados sanos, esta emoción es muy positiva y deseable. En momentos en que reina la alegría no siento pereza, tengo la energía y el discernimiento necesarios para llevar a cabo cualquier actividad que me proponga… ¡ojalá pudiera sentirme así más a menudo!

Cuando empieza a aumentar más allá de lo acostumbrado, me voy volviendo poco a poco más creativa y empiezo a innovar en pequeñas cosas: las combinaciones con mi ropa, inventando recetas en la cocina… Me vuelvo simpática y chistosa, muy ocurrente y ágil mentalmente. La verdad es una pena y me parece injusto tener que activar mis alarmas cuando comienzo a sentirme así, tener que decir: estoy demasiado alegre, algo puede no estar bien. 

De pronto se me ocurren ideas que me parecen buenas, luego alguna de estas ideas me parece buenísima, me emociono, quiero llevarla a cabo, imagino el éxito que tendrá, imagino mi propio éxito, me imagino siendo entrevistada o dando charlas, publicando libros, siendo referencia a nivel mundial…

Al final me pierdo en esta emoción de alegría, alegría eufórica, que a pesar de estar catalogada como «buena», o al menos motivadora y progresista, en exceso paraliza tanto como el miedo: Me emociono tanto que no tengo cabeza para actuar, para planificar y ejecutar el plan. Las ideas se quedan en sueños y no siguen adelante.

En casos realmente extremos, viene el brote psicótico, que es el tipo de crisis que he tenido yo siempre. 

cartel-personaje-ira-en-del-reves-inside-out-389

Ira

Furia por las cosas más inverosímiles. Tal vez esta sea de las emociones que menos expreso cuando estoy equilibrada y nivelada con mis pastillas. Cuando estoy en equilibrio no es fácil hacerme enfadar. Puedo sentirme triste y, si me enfado, por lo general es conmigo misma. No sé si esto estará creando un monstruo en mi interior, pero hasta ahora he sido normalmente así.

Ahora mismo, sin pastillas, cuando estoy sensible, me vuelvo bastante irritable. Por ejemplo: enfadarme hasta el llanto cuando mi marido le da la última galleta a mi hijo y no se le ocurrió preguntarme si quería un pedacito (que por cierto no quería, y hubiera dicho que no de todas formas).

Salen a la superficie todos los complejos, sintiendo que otros no me dan la importancia que merezco, interpretando cualquier gesto como una posible burla hacia mí. Es bastante molesto, porque la palabra «complejo» tiene una connotación muy negativa en mi mente. Ser acomplejado, en mi mente, es de los peores defectos que puede tener una persona, aunque en realidad pienso que la mayoría de nosotros alguna vez nos hemos sentido acomplejados en mayor o menor medida.

cartel-personaje-tristeza-en-del-reves-inside-out-393

Tristeza 

Esta emoción se me parece a veces a la ira en eso de sentir que otros me rechazan o ignoran, que no me dan valor. Reconozco que son sensaciones subjetivas y probablemente esté teniendo distorsiones cognitivas. Creo que me hacen falta más amigos de ver en persona, de hablar cara a cara y no con un aparato de por medio. Tengo algunos amigos de esta clase, pero casi nunca los veo, cada quien está ocupándose de su propia vida.

En estos días la tristeza viene sin avisar y sin motivos sólidos, cualquier excusa es buena para llorar. La única arma que he encontrado contra esto es la tranquilidad de saber que todo está bastante bien en mi vida, que no tengo motivos más que químicos para estar triste. No es por negar esta emoción, estoy de acuerdo con la película en que cada emoción es necesaria, y estoy consciente de que unas lágrimas pueden dar mucho alivio, pero a veces se vuelve desproporcionada.

He comprobado que la tristeza que he sentido durante este embarazo se pasa con el tiempo o con las pastillas, lo que venga primero. El comprobar que estoy siendo víctima de la química de mi propio cuerpo me da un poco de tranquilidad, y he asumido la tristeza como un chaparrón temporal que en ocasiones puedo simplemente aguantar y dejar pasar. Esto funciona más que nada cuando veo que los motivos para llorar en el momento tienen poca importancia, pero hay momentos en que la excusa de mi tristeza deja de ser algo sin importancia y resulta ser algo más serio y real en mi vida, algo que normalmente dolería y que legítimamente me pone triste. En varias ocasiones recurro a la medicación al ver que no se pasa y que estoy sufriendo más de la cuenta.

cartel-personaje-miedo-en-del-reves-inside-out-387

Miedo 

Mis miedos se centran ahora en pensar que puedo estar haciéndolo todo mal, tengo miedo a que algo salga mal con el embarazo o con lo que sea: en las finanzas, con mi hijo mayor, miedo a tener una recaída. También me vienen a veces otros miedos, tal vez más infundados: miedo a que me pongan cuernos, a una ruptura o muerte repentina mía o de mi pareja, a una enfermedad. Hay tantas cosas que te pueden dar mucho miedo, si buscas con esmero -como creo que suele hacer mi mente últimamente, mientras no me doy cuenta- encuentras un miedo para todo.

cartel-personaje-asco-en-del-reves-inside-out-395

Asco 

Desagrado. Esta no me ha afectado tanto, a no ser por las náuseas del primer trimestre, pero no considero que eso sea una emoción.

Guiándome más por el carácter del personaje de «Asco» en la película, quizá sí veo que esto me afecte: me está importando mucho lo que piensen los demás y me angustia bastante la idea de hacer el ridículo. Esta idea se vuelve más angustiosa cuando pienso en una posible recaída que me haga ponerme en ridículo o revelar mi bipolaridad a conocidos, a personas relacionadas con mi mundo laboral o con el entorno de mi hijo, con las que quiero mantener una buena imagen y evitar ser víctima de posibles prejuicios.

Creo que la meta de muchos de nosotros los bipolares es lograr un balance, una medicación y una dosis que nos permita vivir las emociones humanas comunes, que son parte de la experiencia humana y a las que pienso que todos tenemos derecho. Ojalá en algún momento todos podamos vivir intensa y plenamente, pero también sanamente y sin volvernos locos.

3 comentarios en “Bipolar sin medicación: Inside Out al Extremo, Intensamente y del Revés

Deja un comentario