Bipolaridad y Timidez, ¿alguno entre la audiencia?

A veces me molesta mi timidez, creo que ya estoy mayor para estar escondiendo mi personalidad detrás de la vergüenza, pero muchas veces no puedo controlar sentirme tímida.
Algo que me pasa con cierta frecuencia, cuando voy sintiéndome más contenta, es que voy perdiendo la timidez, poniéndome más simpática y extrovertida. Esto me va haciendo sentir mejor, va subiendo mi autoestima, y es cuando empiezo a sentir que me estoy acelerando más de la cuenta.
Dependiendo de a cuánto llegue mi grado de aceleración, puede ser que empiece a actuar bastante más extrovertida de lo normal. Lo cierto es que cuando vuelve a bajar mi ánimo (por el motivo que sea), me viene una especie de resaca, como si me arrepintiera de haber estado tan extrovertida.
Es curioso que muchas veces mi conducta extrovertida de los días un poco “high” no sea nada extravagante, pero a mí me cause angustia pensar que otros me hayan notado muy diferente…. que tal vez algún día descubran “mi secreto”, que tal vez haya hecho el ridículo… esta timidez… me tiene un poco harta esta timidez
Este post lo escribo con la intención expresa de que por favor comentéis. Me sería muy interesante saber si hay otros bipolares tímidos que se sientan como yo y si alguien tiene “trucos” para superar la timidez
Como siempre, gracias por leer!

El Dilema del Bipolar

El dilema del bipolar: qué bien! Me siento feliz… demasiado feliz? Qué mal, no soy libre de sentirme feliz.

Hasta hace poco me había estado sintiendo deprimida. Los fines de semana no quería hacer nada y me daban ganas de llorar sólo por pensar que podía estar deprimida.
Mi psiquiatra me bajó una gota de la dosis que tomo de Clopixol y he ido mejorando.
Ayer noté que estaba especialmente contenta, lo disfruté mucho porque me sentí contenta bien: no para preocuparse. Pero hoy, de pronto, en medio del disfrute de mi nueva “contentura”, me di cuenta de que estaba un poco acelerada.
Voy a estar pendiente a ver si me toca subir la medicación, pero…. ¿no es injusto? No poder disfrutar plenamente de momentos felices por temor a que sea demasiado y se pierda el control… desde que me noté acelerada, ya no estaba tan contenta.
¿Y si subo otra vez esa gota que me habían bajado y vuelvo a deprimirme? ¿Y si utilizo esa gota para subirla y bajarla a discreción dependiendo de cómo vayan fluyendo mis estados de ánimo? Creo que el psiquiatra no lo aprobaría… él es bastante rígido.
Bueno, intentaré seguir razonablemente contenta y estar alerta, no voy a caer en pánico, que seguramente es contraproducente para el humor. Ya se lo comenté a mi esposo y él está al tanto y alerta como yo.
¡Vuestros comentarios son bienvenidos! (Por favor)